Dosmiltrece. Un año más. Pero no otro año corriente. Este año pasado he llorado por quien no merecía mis lágrimas, he abrazado a gente que no se merecía el roce de mi piel y he regalado besos a gente que no los valoraba lo suficiente. Pero ya eso es historia. Mi vida nueva comienza hoy, día uno de enero, a la una y veinte de la mañana. Empiezo
de cero. Una Valeria distinta. Se acabó esa chica que es capaz de pasarse horas y horas mirando el teléfono a la espera de llamadas que al final nunca llegaban, o la misma persona que lloraba cada vez que ponía la cabeza en la almohada y cerraba los ojos. Este año, la Valeria que va seguir adelante va a ser una chica fuerte, a la que lo que le digan los demás no le afecta, que está con las personas que quiere sin ilusionarse demasiado, sin esperar pequeños detalles que nunca nunca N-U-N-C-A llegarían ni llegarán.
No hay comentarios:
Publicar un comentario